SobreLost - Eko Tunde

Biografía:
Eko Tunde nació en 1968, en Nigeria. Eko tiene un hermano, Yemi, a quien cuidó cuando éste era niño. Un día, una monja descubrió a Eko robando comida y lo obligó a confesarse. Eko le explicó que era para su hermano, y se negó a confesarse.

Eko fue reclutado cuando le disparó a un anciano, para impedir que su hermano menor lo haga. Luego los guerrilleros se lo llevaron, alejándolo de se hermano.
De grande, Eko era traficante de drogas, y un día le pidió ayuda a su hermano, quien era ahora el Padre Yemi, que lo ayudara a sacar la droga del país, escondiéndola en unas estatuillas de la Vírgen. Yemi tuvo que acceder cuando Eko lo amenazó con quemar la Iglesia, y entonces Eko y sus compañeros se hicieron pasar por sacerdotes.
Eko y sus compañeros cargaron las estatuillas con droga en una avioneta, y cuando Yemi fue a impedir que continúen, vino el ejército nigeriano y los compañeros de Eko empezaron a disparar. Yemi murió, y cuando Eko subió su cuerpo a la avioneta, lo echaron y más tarde Eko se hizo pasar por Padre.

Eko llegó al pueblo de Yemi, y lo reemplazó como Padre, aunque él no lo era. Eko se enteró que allí, un hombre llamado Emeka se quedaba con el 80% de las vacunas que llegaban al pueblo, por un trato que había hecho con Yemi. Cuando Eko preguntó por ese trato, se enteró por Amina que las vacunas se vendían a un alto precio en el mercado negro. Eko entonces se citó con un vendedor del mercado negro, para vender las vacunas para su beneficio. Emeka, al enterarse, amenazó a Eko y éste atacó a sus hombres y luego a Emeka. Amina le dijo a Eko que comenzara su vida denuevo en Londres, y que algún día pagaría sus pecados.

Eko trabajó en Inglaterra, donde un niño le contó que un día mató a un perro por haber atacado a su harmanita, y a él no le preocupaba el perdó, sinó que el perro lo estuviera esperando si fuera al infierno. Eko también trabajó en Australia, donde un anciano sacerdote le pidió que investigara el informe de un milagro, la aparente resurrección de una joven que se había ahogado el día anterior. Eko visitó a la joven, Charlotte Malkin, y conoció a su padre, Richard Malkin, quien admitió que lo del milagro era un fraude.
En el aeropuerto de Sydney, Eko encontró a Charlotte, quien le dijo que vio a Yemi cuando estaba "entre dos mundos" y éste lo visitaría pronto.

En la isla, Eko cayó del lado de la sección de cola, y ayudó a mucha gente a llegar a la orilla de la playa. Eko mató a dos hombres de los Otros, y como se sintió culpable, tomó cuarenta días de voto de silencio. Cuando encontraron la estación La Flecha, Eko vió La Biblia que tenía un video. Un día, Ana Lucia estaba llorando y le preguntó a Eko por qué tardó cuarenta días para hablar, y éste le preguntó por qué tardó cuarenta días para llorar.
Eko arrojó a Jin, Michael y sawyer al hoyo, y más tarde a Ana Lucia, a quien después le preguntó qué información había obtenido.

Cuando los Tailes se iban a mudar al otro campamento, Eko y Jin fueron a buscar a Michael, y al esconderse pudieron ver a un grupo de los Otros. Luego encontraron a Michael. Eko también llevó a Sawyer herido al campamento de Jack, y luego lo trasladaron al Cisne. Allí, más tarde, Locke y Eko vieron el video de Orientación y Eko le mostró que tenía el otro pedazo.
Cuando Eko se enteró que Charlie tenía una estatuilla de la Virgen, le pidió que lo llevara al lugar de donde las sacó, y en un momento apareció el Monstruo. Eko se quedó mirándolo fijamente, y el humo se fue.

Eko y Charlie llegaron a la avioneta, la quemaron y luego rezaron. Eko más tarde bautizó a Claire y Aaron. Charlie ayudó a Eko a construir una Iglesia en memoria de Yemi.
Cuando Eko descubrió la presencia de Henry Gale, pidió hablar con él y se disculpó por haber matado a dos de los Otros. Cortó dos trencitas de su barba y se las ofreció a "Henry" como símbolo de respeto a los dos hombres que mató.
Eko tuvo un sueño en el que estaban Yemi y Ana Lucia, y le decían que ayudara a Locke a encontar el signo de interrogación. Locke no quiso contarle a Eko qué era el signo de interrogación, así que Eko lo golpeó. Cuando Locke despertó, le mostró a Eko el dibujo del mapa de la puerta blindada. Locke tuvo un sueño en el que Eko trepaba por un acantilado y luego se lo contó. Eko trepó por allí y encontró el signo de interrogación, justo debajo de donde estabala avioneta. Eko y Locke cavaron hasta encontrar otra escotilla.

En la escotilla había monitores, en los que vigilaban la estación El Cisne. Encontraron otro video que explicaba que la observación era parte de un "experimento psicológico". Eko encontró cuadernos y papeles llenos de números y decidió llevárselos. Eko se mudó al Cisne para pulsar el botón, pero como Locke no quería que lo siguiera pulsando, lo atacó. Más tarde, Locke y Desmond provocaron un falso apagón, y cuando Eko salió de allí, Locke y Desmond entaron y cerraron las puertas blindadas. Charlie y Eko intentaron volar las puertas con dinamita, y Eko quedó herido. Locke dijo a Eko que "estaba equivocado", cuando súbitamente Desmond giró la llave de seguridad, provocando la Descarga.

Después de eso, Eko terminó en una cueva de osos polares. Locke y Charlie lo sacaron, lanzándole fuego al oso. Un día, Yemi se le apareció a Eko en su tienda, diciéndole que era la hora de confesar sus pecados, y él sabía donde encontrarlo. Luego Yemi prendió fuego a la tienda, pero Locke y Charlie lograron salvar a Eko. Luego Eko desapareció, y se fue hacia donde estaba la avioneta. En la jungla, a Eko se le aparecieron visiones de sus víctimas, y cuando él intentó escapar y fue a beber agua, vio al Monstruo. Luego el humo desapareció y llega Locke, junto con Sayid, Nikki, Paulo y Desmond. Cuando llegan a la avioneta, Eko le cuenta a Locke que vio al Monstruo. Locke entra a La Perla con el resto, y Eko se queda afuera con la cruz de Yemi y una foto que encontró. Eko ve a Yemi parado enfrente suyo, y éste luego desaparece. Luego Eko lo sigue y Yemi le dice si está listo para confesarse.

Eko le dice a Yemi que no cometió ningún pecado, ya que todo lo que hizo lo hizo para sobrevivir. Dijo que no había elegido la vida que le tocó, y que lo había hecho lo mejor que pudo. Yemi le dijo "me hablas como si fuera tu hermano" y cuando Eko preguntó quién era, Yemi desapareció. Luego apareció el Monstruo y Eko, con miedo, empezó a decir el Salmo 23. El Monstruo golpeó a Eko contra los árboles, y luego contra el piso, matándolo. Las últimas palabras de Eko fueron "Ustedes son los siguientes".